Sobre mí
Me llamo Suelen y amo vivir en armonía con los animales.
Cuando era niña, debido al alto índice de abandono en la zona dónde vivía, rescataba animales de la vida callejera. Sí, rescatar, y curar sus heridas, las físicas, con alimento, techo y medicinas. Pero también las emocionales con amor, mucho amor.
Entre mis aventuras y las distintas colaboraciones con varias protectoras de animales, se despertó en mí una inquietud que luego sería pasión de vida. Decidí dedicarme al cuidado de los animales y lo hice con el corazón.
¿Cómo preparé mi camino? Con estudios profesionales, claro. Comencé a estudiar auxiliar de clínica veterinaria y auxiliar de rehabilitación y fisioterapia. ¡Y también aprendí peluquería canina! Porque mis peludos tienen que estar igual de guapos por fuera que por dentro.
Mi disciplina me llevó a realizar otros cursos básicos, todos relacionados con la salud y el bienestar de los animales, pero… sentía que había más. Mi curiosidad y mi pasión por los animales intuían que entre todos estos estudios había una pieza que faltaba.
La salud no puede ser sólo física, pensaba intuitiva pero correctamente en aquella época. La salud es integral, comprende al cuerpo psíquico y emocional.
¿Acaso podemos desprendernos de nuestras emociones y nuestra psique? ¡Claro que no! Y yo sabía que los animales tampoco. Lo viví, en mis aventuras de rescate y amor, en mi entregas de cuidado, en las curas físicas y emocionales que aplicaba sin separar la una de la otra.
En esta búsqueda, en este camino, encontré esa pieza. Me acerqué al Reiki, aprendí sobre las Flores de Bach, me formé en comunicación animal, comprendí la importancia de al alimentación natural, combiné mis conocimientos con la terapia craneosacral, verifique las bondades de una acupuntura que sigue ofreciéndome la capacidad de aliviar y sanar… y sigo en esta búsqueda de aprendizaje y formación. Todo para cumplir el sueño de mi vida.
Mi experiencia me construyó. Y también lo hicieron ellas. Ellas son mi gata, Marie, y mis perritas, Noa y Life. Juntas hemos logrado mejorar de manera integral la calidad de vida de muchos animales.
Porque gracias a ellas, maestras de vida y sanadoras de tantos otros rescates, nació Rincón de Life. Un camino que hoy empezamos a escribir, huella a huella, a vuestro lado.